Hacemos todo lo posible por hacer de la frontera un lugar más seguro para los migrantes, de eso se trata nuestro trabajo en Nogales, Sonora, México.
Cada servicio que ofrecemos es una oportunidad de impactar la vida de otros, quienes a su vez impactan nuestras vidas de una manera que nos transforman en mejores seres humanos.
Todas las mañanas, de lunes a domingo, los voluntarios de No Más Muertes acudimos al comedor de migrantes de Iniciativa Kino para la Frontera para ofrecer ayuda humanitaria a los migrantes que consiste en llamadas gratuitas y seguras a sus países de origen, ayuda para recibir envíos de dinero y cambio de cheques y tarjetas de débito pre-pagadas. Todo esto con el fin de que los migrantes no se expongan a otros peligros, como extorsión o secuestro.
Aunque parece un trabajo muy sencillo, es un servicio que requiere de un profundo sentido humano. Aunque son unos breves momentos los que compartimos con la persona que está recibiendo el servicio, es tiempo de calidad. En ocasiones al preguntar a quién va a llamar, el migrante nos cuenta su historia. Otras veces cuando la llamada no es respondida, solo queda dar ánimo porque frecuentemente la falta de comunicación con sus familias los hace sentir desconsolados, desesperados. De vez en cuando te comparten su alegría cuando han logrado comunicarse o incluso arreglar un encuentro familiar, a veces uno tiene la suerte de ser testigo de esos emocionantes encuentros.
Ayudar a los migrantes a recuperar su dinero es una experiencia muy alegre, sobre todo cuando quienes reciben la ayuda nos comentan que gracias a eso podrán llegar a casa y reunirse con sus familias.
Al final del día, cualquier servicio que te toque ofrecer es una oportunidad de impactar la vida de otros, de devolverles la fe y la confianza en las personas; es una oportunidad de dar amor y atención, de compartir la vida y dejar huella. Porque más que ayudarlos a ellos, son ellos quienes con sus historias de lucha impactan nuestras vidas de una manera que nos transforman en mejores seres humanos.
Por eso uno siempre vuelve, porque además que ayudar uno aprende todos los días, y los migrantes son los maestros.
Este informe fue escrito por Carolina Íñiguez, voluntaria de No Más Muertes quien vive en Nogales.
Foto destacada: Voluntaria Lupita Aguirre atiende a un señor que ha sido recientemente deportado, lo ayuda a recuperar su dinero del cheque que le ha dado ICE que no se puede cambiar en México. Foto tomada por Ma. Engracia Robles Robles.